And January arrived...

¿Adivinad qué? ¡Feliz 2016!

Ya estamos en 2016, y vamos a por el quinto mes en Canadá. Os contaré un poco como fue mi navidad. El 24 de diciembre, mi familia y yo fuimos a misa, y después de volver de la celebración, vinieron las hijas e hicimos el 'gift exchange', un intercambio de regalos. Después de cenar nos fuimos a dormir, y a la mañana siguiente vino el "big guy", sí Santa Claus. Nos trajo muchos regalos y fue muy divertido abrir los regalos, porque no tenía ni idea de lo que podía ser. Otra vez tuvimos una enorme comida con toda la familia, niños corriendo por todo los lados y chillando por los regalos que Santa Claus les había traído (¡ay! cómo me recordaba eso a una qué se yo... con sus Barbies...) Al final, todos estábamos cansados, pero contentos del día. El resto de los días antes de nochevieja, aprovechamos para quedar e ir a St. John's al downtown y al cine. Como sabéis aquí no celebran el día de Reyes, por lo tanto, las vacaciones son más cortas :( En nochevieja, llegó Andrea que es de Nigeria, y se quedó en nuestra casa algunos días. Celebramos nochevieja como es debido, ¡con uvas! No hubo campanadas en la TV pero sí una cuenta atrás de 10 segundos, por lo que no hubo excusa para no hacer. En vez de 12 uvas, tuvimos que comer diez, estos canadienses que no estaban preparados... Los vecinos empezaron a echar fuegos artificiales y nosotras salimos con nuestros "sparkles" a celebrar la llegada del año nuevo.

Así, en un abrir y cerrar de ojos, las navidades pasaron. Y empecé otra vez con la rutina. El 7 de enero tuve el winter formal dance, y estuvo muy bien, me lo pasé genial. También terminé mis horas de voluntariado en bancos de alimentos, eventos deportivos y demás. El tiempo pasa y no me doy cuenta. El amigo brasileño que ayer entró conmigo a clase, igual de nervioso que yo, se va mañana. Y esas cosas que tanto me preocupaban al principio, ahora se han desvanecido. Estoy muy confusa, porquesé que ya no queda tanto tiempo como antes para volver, y ver de nuevo a la familia, a los amigos, a todo lo que dejé atrás; en fin, que el volver significará dejar algo. Y ese algo es la vida que he creado aquí. Ya no volverá más, y la experiencia se habrá convertido en un recuerdo. He pasado momentos buenos y no tan buenos. Si os soy sincera, había veces que lo único que deseaba era VOLVER. Pero, esos malos momentos, forman parte de la experiencia. Los buenos y malos momentos son los ingredientes de toda experiencia de aprendizaje.

Nos adentramos en el invierno canadiense del "Norte verdadero fuerte y libre". Pronto empezarán los exámenes semestrales, y entra toda la materia que hemos estudiado a lo largo del primer semestre, por lo tanto toca ponerse las pilas y revisar muchos apuntes y temarios. Espero que todo vaya bien.

Un beso muy grande.